Actualmente, la industria aseguradora global se enfrenta a múltiples presiones que frenan su crecimiento de manera exponencial, siendo la inflación la más preocupante de todas. En ese sentido, se pronostica que la misma continuará durante 2023 y 2024, poniendo en jaque a las compañías aseguradoras, puesto que tendrán que pensar en aumentar sus costos de manera considerable para respaldar así sus resultados de inversión y rentabilidad.
Swiss Re ha predicho tal afirmación en su informe “Estrés económico: perspectivas del mercado de seguros global 2023/24”, mismo en el que declara que se espera que las primas de seguros a nivel mundial disminuyan ligeramente en 2022.
En el caso de los seguros de No Vida, la desaceleración del crecimiento mundial y la inflación probablemente reducirán el crecimiento real de las primas por debajo del 1 por ciento este año, con una recuperación a medida que la inflación disminuye y continúa el mercado duro.
En cuanto al Retorno sobre el Capital (ROE), la reaseguradora espera que este solo se reduzca a la mitad a solo 3,4 por ciento en 2022, ya que el desempeño técnico y los resultados de inversión son más débiles.
En el seguro de Vida se pronostica una contracción de 1,9 por cierto en primas globales en términos reales en 2022 a medida que los consumidores enfrentan la presión de los costos este año. Sin embargo, la rentabilidad de estas operaciones está mejorando debido al aumento de las tasas de interés y la normalización de las reclamaciones de mortalidad por COVID-19.
Escenarios posibles para el 2023
Para los resultados de 2023, Swiss Re preparó diversos escenarios posibles. El primero fue abordado como la estanflación estructural al estilo de los años 70 -que sería el más catastrófico de todos debido al impacto de la inflación severa prolongada en los balances-, y el segundo como una grave recesión global, el cual reduciría las primas, el rendimiento de la inversión y los resultados técnicos en la mayoría de las líneas de negocios en el corto plazo.
En general, la reaseguradora habla de un crecimiento real del 2,1 por ciento en promedio en los próximos dos años para el gremio asegurador mundial, por debajo de la tendencia a largo plazo.
En los seguros de No Vida, ve un débil crecimiento de las primas reales este año, fortaleciéndose en 2023 y 2024 a raíz de una inflación más baja y un mercado duro para las líneas comerciales. En seguros de Vida, se prevé que las tasas de interés más altas y la adopción digital ayuden a impulsar el crecimiento de las primas en 2023 y 2024.
Asimismo, el entorno de aumento de las tasas de interés es positivo para los rendimientos de inversión y la rentabilidad de las aseguradoras a lo largo del tiempo, aunque las pérdidas de capital añaden presión a corto plazo.
Finalmente, para abordar el tema de economía en general, se espera que a pesar del crecimiento relativamente resistente este año, habrá un incremente de solo 1,7 por ciento en términos reales en 2023. En las economías avanzadas, se pronostica un crecimiento real del Producto Interno Bruto de 0,4 por ciento -el más bajo desde la década de 1980 fuera de las crisis financiera mundial y de COVID-19- y para los mercados emergentes, se anticipan tasas de crecimiento sustancialmente más bajas que antes de la pandemia, que probablemente se sentirán similares a una recesión.
