En la agenda del Senado Federal se encuentra el Proyecto de Ley 29/2017, que regula los contratos de seguros brasileños y concentra la normativa del sector. Después de más de veinte años de tramitación, con la última versión redactada en 2017 y actualizada ahora por el senador Jader Barbalho, la Ley Especial de Contratos de Seguros tiene como objetivo proteger al consumidor.
Una modificación significativa se refiere al plazo establecido para realizar el pago del siniestro, que es la ocurrencia del riesgo previsto en el contrato de seguro. Según el acuerdo entre el Ministerio de Hacienda y el mercado asegurador, las empresas ahora disponen de 30 días, a partir de la presentación de la documentación, para efectuar los pagos de las indemnizaciones en caso de siniestro.
Ernesto Tzilrunik, abogado especializado en seguros y uno de los impulsores de la ley, afirma que los contratos serán más claros para asegurados, corredores y aseguradoras.
Los seguros deben garantizar todo lo relacionado con el tipo de seguro. El seguro de automóvil, por ejemplo, cubrirá todos los riesgos automovilísticos. El asegurador deberá excluir de esta cobertura amplia aquello que no desee garantizar, ya sean intereses, relaciones económicas o riesgos», explica.
En la suscripción, el cuestionario de evaluación de riesgos deberá ser más claro, objetivo y estandarizado, con las aseguradoras explicando por qué la información es importante para ellas. Una vez más, el objetivo es tener más claridad, libre de vicios. «Las decisiones se toman con indicadores claros. La aseguradora tiene poder porque es responsable de la regulación, dejando de ser una servidora de los reaseguradores«.
La Ley Especial de Contratos de Seguros también se aplicará en los procesos de arbitraje.
Al mismo tiempo, los contratos de seguro celebrados en Brasil deberán ser sometidos a arbitraje en el país, menos costoso y que generará cultura y experiencia. Sin revelar los datos particulares de los casos, deberá haber divulgación de los conflictos y de las soluciones dadas a estos conflictos, es decir, la jurisprudencia arbitral. Se comparte el conocimiento, la experiencia y el desarrollo de las relaciones de seguro», ejemplifica Tzilrunik.
Después de la aprobación de la ley, el mercado tendrá un año completo para adaptarse a los cambios contractuales previstos en la ley, capacitar a su personal, mejorar los documentos, los procedimientos de suscripción y la claridad de las pólizas. El abogado cree que esta nueva legislación deberá promover un mayor entendimiento de la sociedad sobre el seguro, aumentando el consumo de los productos de seguro.
El nuevo texto de la Ley Especial de Contratos de Seguros ha pasado por diversas audiencias públicas y también ha contado con la colaboración de entidades del sector, como la Confederación Nacional de Seguros (CNseg) y la Federación Nacional de Corredores de Seguros (Fenacor).