La ausencia de eventos catastróficos -ya sea naturales o antropológicos- de gran magnitud en América Latina durante 2023 (y desde los últimos cuatro años), ha limitado la actividad de las compañías reaseguradoras dentro de la región.
Esto, además de no generar un endurecimiento de los precios dentro de la industria, deriva en que las reaseguradoras globales estén disminuyendo su apetito por hacer negocio en este territorio y, por ende, las compañías tanto nacionales como regionales tengan la oportunidad de expandir sus ofertas de mercado.
La calificadora AM Best habla de ello dentro de su informe “Menos eventos catastróficos importantes limitan la actividad de reclamaciones para los reaseguradores de América Latina”, en el que también afirma que las reaseguradoras globales han cambiado su enfoque hacia áreas menos propensas a catástrofes como América Latina o han dirigido su capital a regiones que justifican aumentos de precios.
En los últimos cuatro años, los grandes eventos graves ocurridos en América Latina han sido mínimos y no han resultado en pérdidas aseguradas importantes. La mayoría de las grandes reaseguradoras de la región también tienen amplio capital disponible debido a una mayor retención por parte de las cedentes en medio de las duras condiciones del mercado en 2021 y 2022”, señala la investigación.
Cabe destacar que, si bien las catástrofes naturales han sido mínimas durante el periodo de tiempo ya citado, no hay que dejar de lado los riesgos políticos a los que se enfrenta no solo la región latinoamericana sino todo el mundo, mismos que continúan siendo un factor importante para las reaseguradoras domiciliadas en países de nuestra zona, que se ven presionadas por los requisitos de inversión en estados soberanos con una calidad crediticia en deterioro.
Aunque todavía no ha habido una fuga de empresas hacia domicilios menos riesgosos, es una consideración constante en las evaluaciones internas de riesgos de las empresas. El aumento de las tasas de interés podría ayudar a mejorar los ingresos netos de las reaseguradoras si la duración de la cartera también lo permite, dependiendo de la gestión de activos y pasivos”, concluye AM Best.