COBERTURA ESPECIAL.- «El desempeño del Seguro Voluntario de Automóviles en tiempos de volatilidad» fue el nombre elegido por la Federación de Aseguradores Colombianos (Fasecolda) para su reciente conferencia web.
El objetivo de este webinar consistió en explicar y mejorar la comprensión del funcionamiento del seguro voluntario de automóviles, brindando los conceptos fundamentales y las claves de su funcionamiento. Participaron cientos de asistentes del mundo asegurador de América Latina, junto con empresas de la industria automotriz, todos muy atentos a las palabras de los profesionales convocados.
Antonio Garzón, Gerente de Autos y SOAT en La Equidad Seguros, explicó el funcionamiento general de la cobertura, su alcance y cuáles son los componentes que se tienen en cuenta en el “pricing” de un seguro de automóvil. En ese marco, hizo hincapié en los seguros de responsabilidad civil y la importancia en la contratación de los mismos, sobre todo en un marco donde “la principal muerte de personas jóvenes entre 5 y 29 años son los accidentes viales, siendo este un tema de salud pública a nivel mundial”.
Respecto a la tarifación de los seguros automotores, siendo un segmento tan competitivo, se analizaron los componentes por los cuales existe un aumento en la prima de riesgo, en particular, la mano de obra, los costos de asistencia, el costo de autopartes, hurto, accidentes viales y los precios de los vehículos (costo del capital asegurado).
John Suárez Coy, Gerente General de Cesvi Colombia, habló sobre la evolución de la cesta básica de repuestos. Según el ejecutivo, “la mayor parte de los golpes que recibe un auto se dan en la parte delantera del vehículo, la parte trasera un 21%, mientras que el interior es posible que tenga afectación de elementos mecánicos”.
Habló de la forma de comprar repuestos en Colombia, siendo la fuente oficial, las marcas de vehículos autorizadas y todo su registro de repuestos. Desde Cesvi, tienen la capacidad de leer más de 120.000 registros al día, de saber qué es lo que está pasando y cómo se está moviendo esa canasta, analizando en tiempo real cada uno de los registros y repuestos analizados. “Cesvi tiene la posibilidad y la facultad de poder trabajar de la mano con los principales talleres reparadores que se mueven en el territorio nacional y con ellos entendemos cuáles son los repuestos que se están comprando y la usabilidad de los mismos”, declaró Suárez Coy.
Luego prosiguió David Molina, Gerente de Planificación y Performance Comercial de Renault Sofasa, quien presentó la situación del mercado de vehículos nuevos y las perspectivas que esperan para el resto del 2023. Vale advertir que según un estudio de Scrap Car Comparison, después de Turquía y Argentina, Colombia es el país donde comprar un vehículo es muy complejo, pues su costo de adquisición, mantenimiento, impuestos y combustible son muy costosos.
Al respecto, el experto reveló que en este último tiempo, el mercado está sufriendo una fase de “contracción”, donde están observando una “disminución de solicitudes de créditos de alrededor del 10%, lo que quiere decir que todavía hay un apetito, una demanda insatisfecha en el mercado de compradores que solicitan un crédito para comprar un vehículo, pero que se quedan en el camino”. La inflación en los costos de producción, de materias primas y componentes, más la suba del dólar en Colombia, genera que para el cliente sea mucho más difícil adquirir un vehículo, no solo por el precio del mismo, sino porque las tasas de interés con cuotas son altas en los planes de financiación.
A pesar de todo esto, también se ha visto una alta oferta de promociones y solicitudes de crédito para poder acceder a la compra, que no siempre llegan al final. Se torna difícil para los clientes la decisión de comprar un vehículo nuevo, por lo que la mayoría de ellos postergan esto o van al mercado de vehículos usados.
Pese a ello, esperan que para el tercer y cuarto trimestre de este año la situación mejore, para llegar a tener mejores tasas o mejores planes de financiación para ofrecer a los consumidores y para poder de alguna forma darle mayor accesibilidad a los clientes al momento de adquirir un vehículo. Finalmente, prevé que el mercado rondará ventas de 200.000 unidades a fin de año, implicando un decrecimiento en comparación con las 237.000 del 2022.
En cuanto al resto de los mercados de América Latina, según el ejecutivo de Renault, está creciendo un 10% acumulado a abril/23 en el caso de Brasil y México, mientras que en Argentina un 13%, a pesar de todas sus complejidades.
Para cerrar el webinar, estuvo presente Carlos Ricci, Head Motor Solutions & Transactions de Swiss Re, quien habló del mercado del seguro automotor en Estados Unidos, que siempre es considerado como el “leading case” de la industria. Explicó que, a diferencia de Colombia, donde la adherencia a un seguro es voluntario, en EE.UU. los seguros son obligatorios, donde existen diferentes líneas de negocios que se dividen en tres segmentos: responsabilidad civil, los comportamientos y las tecnologías que se están aplicando al seguro de automóviles, y por último, los seguros tradicionales.
En el plano de lo legal, Ricci comentó que en Estados Unidos existe un tema llamado «Litigation Funding«, que trata sobre compañías o personas que ayudan a abogados a hacer investigaciones de litigio para llevar investigaciones hasta las últimas consecuencias y lograr que efectivamente un litigio contra una compañía de seguros ante un reclamo de automóvil tenga un final con una sentencia a favor. Existen compañías que se dedican a apoyar a los abogados a hacer investigaciones muy rigurosas, donde obtienen también beneficios por esos litigios.
El especialista se refirió a algunas problemáticas que sufre el mercado asegurador en Estados Unidos, como por ejemplo el pago de seguros de autos, flotas y camiones y la aparición reciente de la inflación en ese país, que por más de 50 años no había llegado a un número de dos dígitos. Los costos de reparación de automóviles y la escasez de mano de obra en la industria automotriz se están volviendo temas recurrentes para el país norteamericano.
“No estar asegurado no es una opción, ya que tener una pérdida patrimonial propia como un auto o dársela a un tercero sin un seguro es algo que un ciudadano no puede siquiera considerar, porque un siniestro de magnitud puede impactarle profundamente en su patrimonio”, concluyó, tras lo cual se dio un espacio de preguntas para los asistentes presentes.
